FOTO: Marcerock
FESTIMAD 2003
Fotos
directo
AFI + Audioslave
+ Deftones + Disturbed
+ Evanescence + HIM
+ Marilyn Manson + Public
Enemy
+ Skin
30 y 31 de mayo, Parque el Soto Móstoles, Madrid
La edición gótica
Por Iñaki López DE EGUILAZ - IndyRock
Jornada #1
El Festimad'03 regresaba a sus andares con un cartel más
coherente a lo que nos tenía acostumbrados en ediciones
precedentes y rendidos a la cultura más gótica y metalera.
Parece que los estertores que anunciaba la organización al
cierre de la pasada edición reclamando ayuda institucional para
la continuidad del Festimad se quedaron sólo en un ataque de
tos, porque el éxito de público de los dos días era síntoma
inequívoco de la buena salud en cuanto a asistencia. No
había más que pasarse a media jornada festivalera por el
escenario de El Lago, convertido en tradicional protagonista
secundario del evento, para certificar que Evanescence ha
convertido "Bring me to life" en uno de los hits del año y el
tramo final de su concierto evidenció la saturación más
pronunciada de gente en esa jornada en ese escenario. Imposible
acceder una vez comenzado el concierto para aquellos que se
habían quedado rezagados.
La misma gente que
peregrinaba apresuradamente para coger buena fila ante el
escenario principal que abarrotarían Deftones en una gran
actuación que servía de coartada para la presentación de su
disco homónimo con apenas una semanas en la calle. Los
seguidores que hace dos años se quedaron con las ganas de ver a
Limp Bizkit pudieron resarcirse con esta contundente mezcla de
riffs y scratches (no saben cuánto ha ganado el grupo con la
incorporación a los platos de Frank Delgado) que en directo
adquieren una dimensión demoledora. Lástima por el sonido, que a
lo largo de todo el concierto no sonaba todo lo bien que debe
sonar en un recinto como el Parque del Soto. La guitarra se las
veía y se las deseaba para apurar un sonido que no
desmereciera sus riffs y eso en grupo como Deftones es una pena.
Por lo menos nos quedó el detalle por parte de Chino Moreno de
lanzarse a la marea de gente de las primeras filas, que siempre
lo tiene a bien agradecer en estos casos.
El preludio a la noche más oscura del festival corría a cargo de
HIM, que con la reputada trayectoria forjada en la ley del
single congregaron en el escenario de El Lago a una multitud de
urbe siniestra que disfrutó tanto con la novedad del último
disco como la consolidada eficacia de "Join me". No es cuestión
de valorarles sólo por ese enorme single pero para qué nos vamos
a engañar, fue lo más destacable de su paso por el festival
La gran apuesta del Festimad, por mucho que fuera relegada al
primer día, era Marilyn Manson, porque ya me dirán ustedes qué
gancho pueden tener Audioslave, antagonista de Manson en el
segundo día, comparado con la puesta en escena del freak por
excelencia del gótico. El caso es el personaje se hizo derrogar
más de media hora sobre el horario previsto llenando a rebosar
el escenario Festimad y artífice además del gran éxito de
público de ese día (20.000 personas). Más vale tarde que nunca,
así que comenzada la actuación aquello se convirtió en una
vorágine de metal desgarrador con un escenario de fondo con
arcos de medio punto en cartón piedra que ni las películas de Ed
Wood.
Sfdk (Foto Enka Tripiana)
El espectáculo era la
contrapartida a lo que en anteriores ediciones hicieron Slikpnot
y Rammstein, (puestas en directo sobrecogedoras, créanme los que
no los hayan visto) y Manson aunque un poco rezagado en el
balance final cumplió con creces las expectativas creadas en un
principio. Tal vez sea porque él mismo sea ya un icono de fin de
siglo que escapa a cualquier consideración por encima de
banda como ente musical, pero su carisma, ya demostrado een
previa rueda de prensa era algo arrollador. Y el directo
no se quedó atrás, porque los ires y venires en la voz con los
que juega Manson son dignos de soportar.
Jornada#2
La segunda jornada amenazaba lluvia y cumplida ésta durante las
actuaciones de Asian Dub Foundation y Sugarless, el recinto se
diezmó en público poco después de que Iffy pusiera en práctica
esa suerte de combo psicodélico de impecable factura que en
directo suena francamente bien. "Biota Bondo", último disco de
la banda, y que el sello Bittersweet rescataba para España hace
unos meses tras su publicación en el 2001 en los Estados Unidos,
se despachó a gusto con buenos ejemplos de funk como un año
antes hicieran sus compañeros de escudería Big Soul. Lo dicho,
que el espectáculo de Asian Dub Foundation quedó deslucido por
la lluvia, aunque también hay que reconocer el mérito de la
banda londinense para que cuando menos gran parte del público
mantuviera el tipo ante la presentación por segunda vez en
España en unos meses de "Enemy Of The Enemy". Porque no me
negarán que aunque con el fuelle de la novedad más plegado que
con "Rafi's Revenge", esta peculiar fundación consigue
sorprender con esa interesante combinación de beats y drum'n
bass.
Poco después en el
escenario Tipo, Sugarless hacían justa la consideración que la
crítica y público les ha estado brindando en los últimos dos
años y apelando a los instintos más viscerales del metal
cumplían el expediente.Una vez confirmado el retraso de la
actuación de Radio 4 para después de Audioslave, por problemas
de sonido, vendría el que para el arriba firmante iba a ser el
concierto del festival. Public Enemy cubrían la baja a última
hora de Flavor Flav en la pasada edición y de qué modo lo
hicieron. Con una formación clásica de guitarra, bajo y batería
que hacía las veces de reducida big band de funk, Flavor Flav se
hizo con el público en cuestión de minutos alternando el
old-school con el hardcore. Vaya por delante que el gancho de
este buen hombre es ajeno a cualquier consideración egocéntrica,
muy dada en el ámbito del hip-hop, y su talento como MC viene
avalado por años de carrera encomendada al mito. Así que
clásicos revisitados como el "He Got Gome" sonaron de manera
impecable en un directo intenso como pocos, por lo menos de lo
que pudo verse en esos dos días. Poco antes del final de
concierto, Flavor Flav se marcó un numerito en solitario en el
que demostró sus limitadas artes al bajo, guitarra y batería (lo
suyo es el micro) con sus respectivos solos provocando el clamor
del público y demostrando su alter-ego de showman reconocido,
todo ello entre vitoreadas consignas pacifistas y careo con SFDK
incluido sobre el escenario.
Después de este éxtasis los siguientes conciertos puede que
quedaran a menor altura, pero la verdad es que el directo de
Audioslave demostraba una vez más que los híbridos artificiales
entre dos grupos suscitan más interés que pasión. La irrefutable
fama de Rage Against The Machine estaba sustentada en uno de los
mejores guitarristas del mundo como es Tom Morello y Zach De La
Rosa. Cuando ese tándem se rompe y trata de suplantarse la
genialidad de Zach con otro grande del micro como es Chris
Cornell, el agravio comparativo salta a la vista. Ni Chris
Cornel es el mismo en Rage Against The machine o Audioslave como
quieran, ni Zach De La Rosa hubiera sido lo propio en
Soundgarden