

Schwarz: "Para
nosotros la música es algo vital"
Entrevista por
Judith Hebra - IndyRock
Fotos
Isa Nuñez - IndyRock
Schwarz ha iniciado la gira de presentación de su nuevo disco
"Cheesy". El pasado viernes 8 de noviembre estuvieron en Madrid
ofreciéndonos su arriesgada propuesta musical en la sala El Sol.
Esa misma mañana estuvimos conversando con ellos.
¿Qué es Schwarz para vosotros? ¿Cómo se lo presentaríais a
quienes no os conocen?
Alfonso: Nosotros tenemos vocación de grupo psicodélico pero no
entendido a la manera revivalista, sino en el sentido de
llevarte un poco más allá de la realidad. Nos gusta también la
etiqueta de "drug music", que no tiene porque hacer referencia a
tomar drogas, pero sí es música que pretende funcionar como una
droga, que hace el mismo efecto, que te lleva un poco fuera de
la realidad.
En estos momentos todo el mundo se esfuerza mucho en
clasificar adecuadamente la música y esto ha dado lugar a un
abanico enorme de términos inabarcable para las personas de a
pié. ¿Cómo os definiríais vosotros ante quienes no controlan
esto?
Alfonso: La verdad es que se ha llegado ya a tal
especialización en etiquetar que voy a pensar que sirve para
algo, aunque un grupo muchas veces no tiene un mismo sonido, una
sola etiqueta no puede definir el sonido de un grupo, ese es el
problema de las etiquetas, pero si fueran acertadas acabarían
definiendo muy bien el sonido de un grupo. Las etiquetas todos
las utilizamos, y si lo hacemos será por algo.
Cesar: También es como una guía del usuario. Es algo
absurdo ¿no?, porque al final lo que se consigue es que un
montón de bandas se metan en un saco donde no corresponden.
Schwarz es un grupo al que le da lo mismo si lo etiquetan, ¡qué
nos vayan etiquetando!, eso no nos preocupa.
¿Qué le diríais a la gente que contiene "Cheesy", vuestro
tercer LP?
Alfonso: Pop, psicodélica, drug-music...
Cesar: Contiene un puñado de canciones diversas pero
dentro de un todo. Y también un año de esfuerzo tremendo. Desde
el primer momento que empezamos a componer los temas hasta
recopilar el material para grabarlo, llevarlo a una casa,
arriesgar a grabarlo por nuestra cuenta, producirlo por nuestra
cuenta, estar un mes sin poder salir de la casa, y después
compaginarlo con la grabación de Manta Ray y la gira...
¿Qué diferencias encontráis con vuestros anteriores discos?
Alfonso: Hay una diferencia en cuanto al sonido por las
características de la grabación -lo hemos grabado nosotros
mismos-. Este disco es un poco más caramelo, un poco más Pop, un
poco más fácil de escuchar, las canciones son más cortas y
llevan más letra. No somos un grupo que nos guste hacer dos
veces el mismo disco, tampoco estamos obsesionados con cambiar,
dejamos las cosas fluir de forma natural. La densidad y la
obscuridad de un disco como pueda ser "Hard Listening" en
"Cheesy" es más light, un poco más ligero, y eso es "Cheesy".
¿Qué supuso para vosotros grabar "Heptágono" con Manta Ray,
hacer la gira y toda esa experiencia?
Cesar: Fue maravilloso, y ha quedado una amistad
entrañable. A nivel musical nos dimos cuenta de las
coincidencias que teníamos en las canciones y en la manera de
desarrollar los temas, fue bastante divertido.
¿Qué conseguís a través de expresaros con la música?
Cesar: Para nosotros la música es algo vital.
Alfonso: La típica frase de músico de que "la música es
una necesidad" cuando te toca a ti serlo resulta que es
cierta.
De otro mundo
08 Madrid, Noviembre 2002
por
Judith Hebra - IndyRock

Schwarz es difícil de
escuchar para muchas personas, pero esto es sólo el principio de
una sensación que se inicia al descubrir algo tan diferente. Su
música resulta arriesgada porque, como bien dicen ellos,
"pretende hacer el mismo efecto que una droga", sus
ritmos se repiten hasta que se introducen dentro de ti y
te hacen flotar.
El día 8 de noviembre quienes acudimos a El Sol nos encontramos
dentro de un hermoso caleidoscopio multicolor -gracias a las
luces y formas cromáticas que Schwarz nos trajo para ambientar
su directo- que junto con la original propuesta musical de los
murcianos convirtieron la sala en un mundo paralelo, fuera de la
realidad.
El directo de Schwarz es una tormenta para los sentidos. La
predominancia de los sonidos de batería y bajo hacen de su
música un sonido de extraordinaria fuerza tejida en su fondo con
el hilo electrónico del teclado salteado con pedazos de una voz
sutil y sugerente y con toques de guitarra.
Con este concierto Schwarz presentaron su nuevo disco "Cheesy"
(Astro) en Madrid, más accesible para el común de los mortales
que sus dos discos anteriores.

BAM Festival 2002 / Fotos:
Ruth Segarra - IndyRock
Fotos:
J. E. Gómez - IndyRock
Formación
Alfonso Schwarz: Fender Telecaster, Theremin, Jen SX2000,
Voz.
Juanma Martínez: Fender Jazz Bass, Jen SX2000.
Mª Dolores González: Vox Continental, sintetizador, sampler,
piano, mellotron, guitarra, programaciones.
César Verdú: Batería, percusión.
BIOGRAFÍA
En 1997, Alfonso Alfonso abandona su banda, Fuck My Dreams e
inicia una aventura en solitario. En marzo graba en solitario
una demo en 4 pistas (a la que pronto sigue una segunda) bajo el
nombre Schwarz, en la que da rienda suelta a su pasión por la
psicodelia y los sonidos expansivos. Ambas cintas llegan a manos
del sello independiente Greyhead, que le ofrece grabar un álbum.
Nace así "These songs mean nothing" (1998), una colección de
canciones de sabor espacial y onírico tintadas de una suave
melancolía que se convierte a partir de entonces en marca de la
casa. El disco, grabado con la colaboración de un buen número de
músicos invitados, recibe excelentes críticas en la prensa
underground nacional y europea, e incluso es distribuido en
Francia.
Paralelamente a la terminación de "These songs ...", el proyecto
original como proyecto personal de Alfonso se desvanece y
Schwarz se convierte en banda con la incorporación de Juanma
Martínez (bajo, ex-Fuck My Dreams), Julio Velasco (batería,
ex-Fuck My Dreams) - ambos habían participado en las sesiones de
grabación del álbum - y María Dolores González (teclados,
ex-Popstal), debutando en directo en abril de 1998 junto a Manta
Ray.
A principios de 1999 se produce la primera baja: Julio abandona
el grupo y es sustituido por J. A. Ross, líder de Ross. El resto
del año la banda lo pasa girando por pequeños festivales (Lemon
Pop, Felipop, Magic Festival...) y preparando las canciones de
su segundo disco. Abandonan el sello Greyhead y Alfonso Alfonso
co-funda Sandwich Records, sello para el que Schwarz graban a
principios del 2000 "Hard listening". Se trata de un disco aún
más emocional y expansivo que el anterior y en el que el grupo
deja clara su predilección por la creación de atmósferas. Esta
vez las buenas críticas no se limitan a la prensa underground:
aparecen excelentes reseñas en Rockdelux y Rock Sound (por
hablar de dos de las principales publicaciones musicales
españolas) y en Rockerilla (uno de los principales magazines de
Italia). El disco, además, despierta el interés de la
discográfica Astro Discos, que pasa a ocuparse de su
distribución y promoción.
Nada más finalizar la grabación, y por problemas de
compatibilidad con Ross, su proyecto principal, J. A. Ross deja
el grupo, siendo sustituido por César Verdú (batería, ex-The
Braslips). A continuación la banda se embarca en la gira de
presentación de "Hard listening", que incluye una aparición en
el programa de TV "Los Conciertos de Radio 3". A mitad de la
gira se produce una nueva baja: María Dolores abandona. El grupo
decide continuar como trío, dándole a las canciones un matiz
ligeramente más futurista.
Gracias a la admiración que Manta Ray profesan por "Hard
listening", en septiembre de 2001 Schwarz se trasladan durante
dos semanas a Gijón para ensayar con la banda asturiana (y
posteriormente grabar en Madrid) lo que a finales de año será
"Heptágono" (Astro Discos, 2001), un álbum de colaboración en el
que ambas bandas se funden en una sola (dos guitarras, dos
bajos, dos baterías ...), amén de versionarse mutuamente.
Previamente, y tras algún tiempo de contactos, la banda ficha
por Astro Discos (sin abandonar Sandwich Records, sello
encargado de la edición en vinilo de "Heptágono" en 2002).
Paralelamente, nuevo material de Schwarz ve la luz: un
split-CD-Single con Ross (en el que se incluyen dos outtakes de
las sesiones de "Hard Listening"), editado por Sandwich Records
(2001), y una canción inédita en el volumen 4 de la serie
"Floralia", recopilatorio de bandas psicodélicas de todo el
mundo que edita el sello italiano Mizmaze Records (2002).
Después de la experiencia con Manta Ray y la exitosa mini-gira
de presentación del disco conjunto, el grupo decide encerrarse
en su propio estudio de grabación, Etéreo, para grabar "Schwarz
play christian rock" como anticipo de su nuevo disco "Cheesy".
Cheesy sale a la venta a finales de 2002 con un gran éxito de
crítica y público. La banda se embarca en una larga gira de
presentación por toda España que concluye con la actuación en el
Festival Internacional de Benicàssim. Schwarz son considerados
por prensa, radio y publicaciones de internet como una de las
mejores bandas nacionales de 2003. "Cheesy" es distribuido,
además de en España, en Alemania, Holanda, Bélgica, Suecia,
Noruega, Rusia, México, Chile y Argentina.
Después de esto, Schwarz pasan las Navidades acondicionando su
estudio Etéreo para la grabación de lo que iba a ser su
siguiente trabajo, "Arty Party". El álbum es publicado en mayo
de 2004 tras un largo proceso de grabación iniciado en noviembre
de 2003. El álbum es publicado en 3 formatos: edición económica
de bolsillo (9 temas), edición digipack (10 temas) y edición
numerada de doble vinilo de 10 pulgadas (11 canciones en total).
Cada formato tiene además un diseño diferente.
Schwarz graba en verano del 2006 en los estudios BluBox de
Colonia (Alemania) los 10 temas que compondrán su próximo
trabajo "Heavengazers". El trío continúa explorando las
posibilidades de la psicodelia, la repetición de ascendiente
kraut-rock y el ruido, buscando el equilibrio entre la
experimentación y la concisión en unas canciones menos
enmarañadas, más asequibles. Heavengazers, es publicado en 2007
por su nuevo sello, Acuarela Discos, y distribuido en toda
Europa, Estados Unidos, Rusia, y Japón.
La formación de Schwarz ha permanecido invariable desde los
cambios posteriores a la grabación y publicación de "Hard
listening": Alfonso Alfonso (guitarra, teclados, theremin, voz),
Juanma Martínez (bajo, teclados) y César Verdú (batería,
percusión, programaciones).
La propuesta de Schwarz ha calado fuerte fuera de nuestras
fronteras, son uno de las pocas bandas murcianas que han
realizado varias giras por países como: Portugal, Francia,
Bélgica, Holanda, Alemania, Suiza, Rusia. Es un grupo que le
gusta el riesgo hasta el punto de nunca repetir el mismo show,
cambiando de repertorio cada vez que suben a un escenario,
acompañados de su mundo de imágenes caleidoscópicas que hacen de
su propuesta un espectáculo intenso e inolvidable. Los
murcianos/marcianos (como la critica les denomina) se muestran
como una de las formaciones más potentes de la escena
independiente actual. Detrás de la psicodelia y del pop, detrás
de los teclados y de los theremines, se esconde un grupo de
rock. Con mayúsculas.
PLAY CRHISTIAN
ROCK
A Schwarz nos gustan las etiquetas. Nos gustan tanto que las
utilizamos como título de nuestros discos. ¿Qué mas da que no se
correspondan con la realidad? Ninguna lo hace. Nos dicen "rock
experimental", pero la experimentación es una actitud, no un
estilo. Nos hablan de "post-rock", y cuando por fin consigo
descifrar el significado de la palabra descubro que la mayoría
de grupos de ese mambo ni siquiera me gustan. Pero hay otras
etiquetas que no eludimos, aunque sólo se puedan aplicar a
ciertos aspectos de nuestra música: el "drone", como voluntad de
trance, o más bien de autotrance; la "psicodelia" (entendida
siempre desde un ángulo no revivalista) como filtro de la
realidad; el "avant pop", como intento de llevar las melodías
que siempre nos han cautivado a una dimensión desconocida; el
"ambient", como juego de texturas y sonoridades; el "space
rock", como ensoñación escapista. ¿Y el rock cristiano? Ejem...
Este e.p. no es un adelanto del próximo álbum, sino un apéndice.
Ninguna de sus cuatro canciones aparecerá en el disco. A pesar
de que se grabaron durante las mismas sesiones, forman un cuerpo
aparte, y siempre fue así. Nunca se pensaron para el álbum. En
nuestra opinión tienen una cualidad que las diferencia. Y bien,
puedes preguntar, ¿cuál es esa cualidad? A estas alturas ya
deberías saberlo: rock cristiano.
A. ALFONSO (Schwarz) mayo 2002
ARTY PARTY
Gestado prácticamente desde que terminó la grabación de
"Cheesy", su álbum anterior, y tras un largo proceso de
grabación que comenzó en noviembre pasado en su propio estudio
(Etéreo), ahora termina el proceso de producción.
El álbum aparecerá el próximo 17 de mayo de 2004 en tres
formatos distintos: el económico de bolsillo, en edición
especial de digipack (con un tema extra) y en doble 10''
numerado de vinilo (con dos temas extra). Además cada edición
llevará una portada diferente (puedes verlas en
www.astrodiscos.com)
En cuanto al contenido, dejemos que Alfonso Schwarz defina su
propio disco.
La primera a bocajarro: ¿Es la música de Schwarz "arty"? A ver,
déjame pensar. "Arty", ese concepto peyorativo y denostado, o
sea que debería responder que no. Pues sí, lo es, como lo es la
de Suicide, Kraftwerk o Velvet Underground. ¿Y "party"? ¿Es la
música de Schwarz "party"? También, como la de The Stooges,
Black Sabbath y Quickspace. ¿Pueden estos dos elementos
coexistir en un disco sin caer en la esquizofrenia o, en el
mejor de los casos, la dispersión? Respuesta: ¿acaso la vida
misma no está llena de contrarios que se necesitan para ser?
Pero no nos pongamos metafísicos, es sólo rock'n'roll.
No hay en este disco canciones "arty" ni canciones "party".
Todas son "arty-party", aunque casi nunca contengan el 50% de
cada ingrediente. Una vez más, real como la vida misma. Esta
afirmación nos acerca al concepto de "disco-verité" tan querido
por mi querida "nouvelle vague" (bueno, era "cinema-verité" pero
da igual; todo el mundo manipula los conceptos para sustentar
sus teorías). Un momento, esto sí que no. ¿Schwarz
"música-verité"? ¿Dónde está el comentario social? Respuesta: en
ningún sitio. Es más, puede que éste sea nuestro disco más
onírico, el disco donde los "drones" tienen un mayor
protagonismo, donde el subconsciente fluye y se expande de una
manera más libre. ¿Lo hace eso menos verdadero? Sería tanto como
decir que una revolución vale más que un sentimiento. ¿Lo crees
de veras? Es la existencia la que configura la realidad y le da
sentido, no al revés. Pero no nos pongamos metafísicos. Es sólo
rock'n'roll.
Por cierto, ¿has leído alguna vez una hoja promocional más
"arty"?
ALFONSO ALFONSO
SCHWARZ ` PLAY
CHRISTIAN ROCK ´ ASTRO DISCOS
por Fernando Navarro - IndyRock

A medio camino entre el kraut rock
(tan querido por ellos, tal y como se demostró en el compartido
`Heptágono´) el post-rock y el prog-rock (etiquetas siempre
injustas que sólo sirven para remarcar la personalidad atrevida
y cambiante de esta banda) `Play Christian Rock´ es un extenso
ep que adelanta un nuevo giro estilístico de Schwarz. Grabado
casi a interferencias, a violentas interrupciones y
perturbaciones en las ondas y la cinética, `Play Christian Rock´
es una obra espacial, misteriosa, que se convierte (quizá por el
envoltorio magnético que la cubre) en una evocación de los
sonidos posibles de cualquier mundo imposible de Arthur C.
Clarke o Ray Bradbury. Reinterpretación mecánica del rock
cristiano, insistente, a veces casi minimalista, el proyecto de
Schwarz se ve superado por unas atmósferas enrarecidas,
difíciles, alcanzando cimas suicidas, innecesarias como la
violentísima `Dear Cancer´ (desde ya uno de los temas del año)
cuyo estallido guitarrero está más cerca de Pink Floyd o de King
Crimson que de cualquier banda actual y que acerca a Schwarz a
un quebradizo terreno de lo extremo, lo radical; que suele ser,
casi siempre, en este mundo tibio y cobarde, afeminado, lo
genial, lo sublime. Lo que permanece.
SCHWARZ `CHEESY´
ASTRO DISCOS
Por
Fernando Navarro - IndyRock

Dejada atrás la experiencia compartida
con Manta Ray (el más que interesante y poco apreciado,
`Heptágono´) y el estupendo, violentísimo ep `Schwarz play
Christian Rock´, el trío murciano consolida su propuesta dando,
paradójicamente, un paso atrás en su imparable evolución y
deteniéndose en el pop. Guitarras afiladas (a veces
afiladísimas), (menos) atmósferas y (bastantes) excelentes
melodías en un disco donde la capacidad de experimentación se ha
reducido para dar paso a canciones (en algunos casos
canciones-canciones como la ruidosamente optimista `The
Imposible Dream´, la excelencias rockeras de `Cheesy´ o la
melancolía de la hermosa `Glad of Being Sad´) y a arcaizantes
artefactos sonoros. Disco, por lo tanto, menos osado de los
esperado, denso e hipnótico, pero también accesible y emotivo,
`Cheesy´ tiene, entre sus numerosas virtudes, su concepción
textual, basada en largos desarrollos instrumentales,
repetitivos, mántricos (la cósmica `You and me and the Vacuum´)
que produce un abrupto viraje del kraut (aún presente, pero
menos) a la psicodelia abstracta (los más de ocho minutos, con
ese riff lisérgico, de `Peppermint´) o a la electrónica
básica, analógica (`I belong to winter´) Todo ello bajo el
conjunto de un álbum bien construido, armado, coherente y maduro
que lo convierte en una de las cimas sonoras de lo que llevamos
de temporada y a Schwarz en una banda fascinante, aún llena de
cosas por decir.
SCHWARZ
`ARTY PARTY´ ASTRO DISCOS 2004
por
Fernando Navarro- IndyRock
Embarcados ya en un viaje sin vuelta atrás al corazón
mismo del kraut rock, a la experimentación sónica y a los
continuos desafíos retro (para ello se hicieron construir
Etéreo, su estudio de grabación, cien por cien analógico y lleno
de viejos instrumentos) el trío murciano Schwarz le da una nueva
vuelta de tuerca a los ambientes y vapores de `Cheesy´, su
anterior disco, con este `Arty Party´, algo así como una versión
corregida y aumentada de todas las audacias sonoras, de todos
los hallazgos de producción de sus anteriores trabajos.
Reflexión más o menos cachondona, plagada de sentido del humor
(atención a los títulos de los temas) sobre el mundo del arte y,
especialmente, sobre el gran negocio del arte, `Arty Party´ se
convierte, a medida que avanza, entre las canciones (algunas
estupendas como la genial `Hipnohimno´ o la romántica rudeza de
`Nouvelle Vague´, la ingenuidad pop de `Raining Stars´ o la
balada espacial de`100% Fun Free´) y los arrebatos sonoros, las
propuestas más densas, menos accesibles (la amenaza de `Specimen
3´, la violenta efervescencia de `Droning Forever´ o los casi
doce minutos de `Pychotic Hypnotic´ donde Schwarz practican su
entretenimiento favorito: atmósfera enrarecida, inquietud,
misterio y perversión que acaba degenerando en una explosión
ruidista y peligrosa) en un perverso juego de muñequitas rusas,
en una especie de museo con forma de laberinto en el que, una
vez dentro, comprometido con el arte, ya es imposible escapar y
uno queda a expensas de las obras que lo habitan y que respiran,
viven en él.
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