FOTOGALERÍA: MADRID 30 ABRIL 2023. FOTOS: VÍCTOR DÍAZ FLORES
EELS
WONDERFULL... GLORIOUS
La Riviera. 30 de abril. Madrid
Un año después de programar la gira de presentación de su último disco, postpuesto por los
últimos coletazos del tema pandémico, cerraban su gira europea en Madrid los Eels o, lo que es
lo mismo, el acompañamiento en forma de banda de su cantante/compositor/frontman, Mark Oliver
Everett.
VÍCTOR DÍAZ FLORES * CRÓNICA Y FOTOS * INDYROCK
Con 14 discos a sus espaldas y una frecuencia de visitas a la capital casi equivalente a su
discografía, ya se echaba de menos la presencia del grupo en Madrid, cuyas últimas actuaciones
se habían programado en grandes festivales (DCODE y Mad Cool), formato en el que la banda, en la
humilde opinión de este redactor, no muestra el potencial que tiene. Los Eels no son un grupo de
estadios o lugares inmensos en los que se necesitan pantallas para ver al artista, la intimidad
de la letra de sus canciones no parece encajar con ese tipo de recintos.
Si es cierto que las canciones del grupo son sencillas, casi siempre los mismos cuatro acordes
una y otra vez, tocados en una guitarra Danelectro que Mark siempre utiliza, que combinados dan
la seña de identidad de la música de los Eels tiene. Sin embargo, es esa sucesión de notas lo
que hace a la banda pueda envolver unas letras magníficas que hacen que todos sus discos
resulten, al final, diferentes.
Mitad de puente largo en la capital y, a pesar de que a menos de 30 minutos de empezar el
respetable no ocupaba ni un cuarto del local, la sala terminó hasta la bandera para disfrutar de
una nueva noche en el local habitual de la banda en Madrid. Incluso el propio Mark recordó que
hacía diez años y dos días que no tocaban allí (fecha clavada), prometiendo volver para regocijo
de la afición.
Extrañó que no hubiera teloneros, teniendo en cuenta que el grupo suele calentar el ambiente con
bandas o cantantes bastante buenos. Incluso en 2010, tuvieron tres teloneros, siendo uno de
ellos un ventrílocuo, toda una declaración de intenciones.
Si es cierto que han pasado muchos años, se va teniendo una edad y no está el tema como para
tirar helados a la gente mientras se canta Summer in the City (como sí ocurrió en el bolo al que
me acabo de referir). Con 60 años recién cumplidos, se presentó Mark, acompañado de Chet (con el
que celebraba 20 años de relación profesional) a la guitarra “buena”, como el mismo cantante
declaró, “Big Al” al bajo y Little Joe a la batería. Todos enfundados en chaquetas de estilo
crupier de Las Vegas y gafas de sol, atuendo habitual en las últimas giras.
No se necesitaba gran escenografía o juegos de luces para convencer a un público deseoso de ver
al grupo en directo. Mark estaba bastante cómodo, prescindiendo incluso de sus zapatos,
comenzando el concierto sin tocar más instrumentos que unas maracas. Desde el inicio se notaba
que el rock había vuelto al repertorio de la banda, olvidando los temas al piano. Ese periodo de
los primeros años de la década pasada, en los que publicó cuatro discos de un intimismo
rampante, ha pasado. El rock vuelve a ser bienvenido.
Mucha de la culpa de la contundencia en los momentos más intensos del concierto la tuvo la
pegada del último miembro incorporado a la banda, Little Joe -el batería-, que lleva a la banda
en volandas para alcanzar en conjunto un sonido en directo que pocos grupos pueden lograr sin
“ayudas”. El batería tuvo incluso su momento de gloria rockera, con un solo de batería al más
puro estilo Glam Metal, y eso que el hombre no tiene mucho pelo. En la gira anterior, el mismo
Little Joe cantaba una canción presentándose a si mismo, mientras que en esta la canción se la
dedicaba a su hija para que se durmiera, lo cual hubiera resultado del todo imposible con esos
pisotones al bombo.
A pesar del tono más que movido de concierto, no se olvidó Mark de esas canciones que hablan de
su vida, pero que son aplicables a la vida de cualquiera, ya que hablan de gente normal a que le
pasan cosas normales. Como te puede pasar a ti o a mí. Sonaron 3 Speed, It's a Motherfucker o I
Need Some Sleep, canción donde la unión con un público totalmente entregado se hizo patente y
creó un ambiente ideal para el resto de la velada. Creí, incluso, ver varias lágrimas en
las caras del público tras esos temas más íntimos.
Diseñar un setlist con una carrera de 30 años suele ser complicado, siempre vas a tener en el
público a alguien que quería que cantes la cara B del aquel sencillo japonés del 99 que venía en
una caja de galletas especial coleccionista. Pero con bastante buen tino, el grupo incluyó una
selección de canciones de, prácticamente, todos sus discos. Desde las coreadas Novocaine for the
Soul o Last Stop: This Town de sus dos primeros álbumes a habituales en sus giras como I like
Birds. Tampoco faltaron las habituales versiones de temas ajenos -hasta 5-, en esta ocasión no
hubo nada de Prince, pero si sorprendentes versiones de You really got me de The Kinks (con la
letra adaptada a las andanzas del grupo) o del Watcha Gonna Do About It de The Faces.
La selección elegida hizo que las casi dos horas de actuación se pasaran volando, más aún si al
día siguiente el público no tiene que madrugar y puede salir a la noche primaveral de la
capital. Tanto sorprendió el cariño con el que el público disfrutó del concierto que era muy
ocasional el uso de móviles para grabar cosas que luego no vas a ver. Aunque, es posible que eso
esté relacionado con que el público sea de la generación anterior a la irrupción de la
tecnología y gusta de disfrutar las cosas buenas.
Con una versión de los Argent, que no de los Kiss (God Gave Rock and Roll to You), la banda se
despidió tras dos bises. Mark ha prometido regresar, por tanto, aquí estaremos cuando vuelva.
HISTÓRICO EN INDYROCK
CRÓNICAS, FOTOGALERÍAS, COMENTARIOS
FOTOS: David - Mc Clelland
Abril 2013 Dublin Olympia Theater
Crónica
Raúl Vegas - IndyRock
Fotos de
David - Mc Clelland
Arrancó la gira Europea de presentación del último trabajo de “Mark Oliver”, más conocido
como Mr. E y su banda, los Eels. Dublín fue elegida esta vez como una de las ciudades para
la presentación de su último trabajo “Wonderful, Glorious”, que recaerá en ciudades
españolas a finales del mes abril. Un nuevo trabajo de este peculiar prolífico personaje, que
está siendo reconocido por casi toda la crítica internacional, como uno de los mejores trabajos
publicados hasta la fecha. Un trabajo, que podríamos entender como una continuación a la
trilogía de los tres últimos álbumes publicados, “Hombre Lobo”, “End Times”, y “Tomorrow
Morning”.
Eels no habían vuelto a tocar en Dublín desde el 2009 como concierto único. Lo hicieron en el
2010 como parte del cartel del “Electric Picnic” Festival de ese mismo año. Lo que lo
hacía ser uno de los conciertos esperados de este año, y que se vio obligado a prolongarse por
dos fechas, ya que las entradas para el primer día llegaron a agotarse en tan solo unas horas. Y
al igual que sucediera el primer día, para la segunda fecha, también se volvieron a vender todas
las localidades del Olympia Theater (lugar escogido con mucho acierto por parte de la
promotora).
Estábamos expectantes de ver cómo nos sorprendería esta vez el señor E. Este polivalente
músico-compositor, conocido por sus excentricidades (las diferentes caracterizaciones de sus
personajes reflejadas en sus relatos musicales) y sus estados de ánimo. Estábamos a la espera de
ver como quedarían plasmadas en el escenario tras la publicación de este nuevo trabajo, y
de ver que ocurriría esta vez.
Aparecieron uno por uno en el escenario, ataviados en un chándal de la marca Adidas como
si se tratara de un equipo de baloncesto, esperando a que su gran capitán apareciera en escena
para ofrecer otro gran recital.
Iniciaron el show con “Bombs Away”, que al igual que en su último trabajo, sirvió de
inicio para esta nueva aventura musical. Todo estaba bien organizado, el sonido era perfecto,
todos tenían bien aprendido su papel, y cada uno estaba en su posición .Nada más había que
seguir el guion.
La velada continuo con el segundo tema que abre el álbum, “Kinda Fuzzy”, un tema muy
pegadizo al estilo electro Eels que tan bien le resulta a E, y al que nos tiene
acostumbrados, llevándonos a explorar diferente estilos musicales, demostrándonos again,
las buenas aptitudes que tiene a la hora de componer. Seguidamente “Stick Together”, también de
su último trabajo, sirvió para un pequeño cambio en el guion que no afectaría al resultado
final, el “Oh Well” de los Fleetwood Mac, una de las versiones más contundentes y
poderosas que he podido disfrutar de este tema, que junto a temas como el “Tremendous Dynamite”,
Prizefighter”, y “Souljacker I” sirvieron para hacer reaccionar al público y como de una
bofetada se tratara , sirviera para hacerles prepararse para una noche de Rock.
El sonido era contundente, limpio y directo, se podía denotar una actitud más positiva de
E, como si un nuevo día o una nueva aventura le esperara. Y lo demostró con las pequeñas
interrupciones que realizo a lo largo del concierto, pidiendo a cada uno de los miembros
de su equipo , ja,ja.. que se acercaran de uno en uno a abrazarle, hasta donde se había situado
en el escenario, felicitándoles por sus “buenas maneras”, entre canción y
canción. La noche tuvo momentos para
todo, momentos relajados como “Fresh Feelings”, “The sound of Fear”, el “Turna round”, de su
último álbum, y otra vez, una versión de otro clásico, el “Itchycoo Park” de los Small Faces
acompañado por los bailecitos de los allí presentes.
En las dos veladas desgranaron gran cantidad de los temas de su último disco, e incluso
repitieron una escenificación de una entrega de votos, en una especie de altar simulado entre E,
y su fiel compañero Cheap, con el que lleva trabajando 10 años. Un compromiso que quedo
sellado con el saludo secreto de los Eels (ya no tanto secreto como afirmo el batería), para
reafirmar su relación. Y en la que, en la segunda velada volvieron a repetir, pero esta vez,
acompañados por un gaitero irlandés como si de una boda tradicional irlandesa se tratara.
Momento en el que los demás componentes de las banda utilizaron para entonar el “Go Cheap”
a revoluciones ramonianas, para homenajear al ahora sí, guitarrista oficial de los Eels.
Sonaron seguidamente los primeros acordes de la que es posiblemente la canción más
contundente, rabiosa y que mejor representa la vida de este luchador nato, que tan bien sabe
canalizar a través de sus composiciones musicales, “Souljacker, Part I”, para
posteriormente enlazarlo con el tema que da título a su último trabajo, y el que llevaría
a la banda a un pequeño receso tras una hora y media de concierto, el “Wondereful, Glorious” (
posiblemente el mejor tema de su último trabajo).
Tras unos minutos y tras el clamor del público, los Eels reaparecieron en el escenario para
regalarnos otras dos sorpresitas, un tema que aparece en el la edición deluxe, del último disco,
“I’m Your Brave Little Soldier” y un meddley del “My Beloved Monster/ Mr E’s
Beatiful Blues”. Saludos al público, el público del teatro en pie con los cinco miembros de la
banda haciendo un corrillo y felicitándose unos a otros tras esta brillante
representación.
Parecía que todo terminaría aquí, pero…… había más. No contentos, y tras el gran
clamor del público, y tras haberse despedido por segunda vez, de nuevo saltaron al escenario
para agradecer a la afición irlandesa su cariño con otro par de temas. “Fresh Blood”, secundado
por un brillante juego de luces tenues en rojo sangre con flases parpadeantes blancos y los
aullidos del público, y “Climbing to the Moon”, fueron las canciones más acompañas por las
voces de los allí presentes en el Olympia Theater de Dublín.
Dos veladas que finalizaron tras casi dos horas de poderoso directo y perfecta ejecución
de sonido, en las que fueron intercambiando muchos de los temas de sus últimos tres trabajos
básicamente, y donde el público llego a echar de menos algunos de los temas más conocidos de
anteriores trabajos.
Y cuando las luces de escenario se habían encendido, cuando la mitad de los asistentes habían
abandonado el teatro, y los de seguridad nos estaban invitando a dejar el lugar, “E” y los
suyos asaltaron por tercera vez el escenario, llevándonos a un éxtasis y estupor
generalizado a los que allí todavía permanecíamos. Otras dos canciones, que
alternaron con “Dog Face Boy” y “Peach Blossom”. Y el tema que regularmente utilizan para
animarse a sí mismos y seguir Rockeando el mundo, el “Go Eels!, poniendo así, el broche de oro a
este guion llevado a la perfección.
Dcode Festival 2011
Fotos y crónica
Marina Sanz Domínguez y Javier Alonso Juliá.
BIOGRAFÍA
Eels (Anguilas) es el proyecto personal de Mark Oliver Everett, conocido como E., un
multiinstrumentista camaleónico y atormentado, casi depresivo, que busca siempre la mejor
instrumentación para cada canción, recorriendo a un sinfín de sonidos.
El grupo, que debutó en España en abril de 1997, abandonó en su tercer disco, "Daisies of the
Galaxy", la tristeza depresiva de sus dos anteriores obras, "Beautiful Freak" y "Electro-shock
blues", marcadas por el suicidio de su hermana y la muerte de su madre tras una larga
enfermedad.
Equiparables a Los Secretos por su capacidad para componer excelentes canciones de rock a partir
de la melancolía, Eels se fundó después de que E., que había editado dos discos en solitario
entre 1992 y 1994 -"A man called E" y "Broken toy shop"-, se liberase del contrato que le ligaba
a Polydor para montar su propia banda junto a su antiguo batería, Jonathan "Butch" Norton, y al
multiinstrumentista Tommy Walters.
El grupo fue uno de los primeros fichajes de la discográfica Dreamworks, creada por una serie de
magnates del mundo cultural entre los que figuraba Steven Spielberg.
Canciones como "Novocaine for the soul", "Susan's house" o "Not ready yet" figuraban en su
primer álbum, "Beautiful freak", al que siguió, en 1998, "Electro-shock blues", posiblemente uno
de los álbumes más desgarradores de la década y que no se presentó en directo en España, como su
antecesor, al suspenderse la gira por la muerte de su progenitora.
Tras un tercer disco más radiante y que indicaba que, por fin, empezaba a salir el sol para E.,
Eels puso a la venta el año pasado su cuarta obra, "Oh what a beautiful morning", que se podía
adquirir únicamente en su página web (www.eelstheband.com) y que recogía en directo la gira
mundial de la Eels Orchestra 2000 y la gira en solitario de E. con Fiona Apple.
Lisa Germano, David Hlebo, Steve Crum, Orest Balaban, Probyn Gregory y Butch acompañaron a E. en
la Eels Orchestra 2000 para interpretar piezas como "Oh what a beautiful morning", "Abortion in
the sky", "It's a motherfucker", "Ant farm", "Feeling good", "Vice president Fruitley", "Hot and
cold" o "Something is sacred".
El pasado mes de septiembre Eels publicó su quinta obra, "Souljacker", donde E. aparece con una
nueva imagen, semejante a 'Unabomber', y en el que contó con John Parish (PJ Harvey, Dominique
A.) como coproductor de un disco en el que también participaron el bajista Adam Siegel, el
guitarrista Joe Gore o Butch.
Se trata de un disco más rockero y denso, desnudo de arreglos, con reminiscencias bíblicas,
'freaks', fantasmas, bellos durmientes, 'samplers' de sus propias canciones y toques de folk en
canciones como "Dog faced boy", "Fresh feeling", "Friendly ghost", "Teenage witch", "World of
shit" o las dos partes de "Souljacker".
En directo, Eels acostumbra a incluir canciones inéditas o desperdigadas por recopilatorios y
sencillos como "Animal", "Bad news", "Dog's life", "Fucker", "Funeral parlor", "Manchester
girl", "Stepmother" o "Thirteen", así como versiones de "Altar boy" (Rickie Lee Jones), "Dead
Flowers" (Rolling Stones), "Livin' Life" (Daniel Johnston), "Open the door" (Magnapop), "If I
was your girlfriend" (Prince) o "Damn I wish I was your lover" (Sophie B. Hawkins).
EELS regresan cuatro años después con su nuevo álbum, "The Deconstruction", que se
publica el 6 deabril de 2018 a través de su propio sello E Works.
Su líder absoluto, Mark E. Everett, declara:"Aquí tienes 15 nuevas canciones
de EELS que pueden inspirarte o no, sacudirte o no. El mundo se ha vuelto loco. Pero si buscas,
aúnpuedes encontrar cosas bellas. A veces no tienes ni que buscarlas. Otras veces tienes que
esforzarte por crearlas tú mismo. Y luego estánlas ocasiones en que tienes que destrozar algo
para encontrar algo bello en su interior".
Más de un millar de bandas y artistas con página informativa en
IndyRock magazine
INDYROCK MAGAZINE
CONCIERTOS
Agenda
FESTIVALES
Agenda
ANUNCIOS
Tablón
CONCURSOS
Rock, pop...
PRODUCTORAS
Salas, estudios,
locales...
GRUPOS
En IndyRock